El “veranito financiero” hizo que los economistas reajusten a la baja sus estimaciones sobre las cotizaciones futuras del dólar y la inflación.
Entre la suba controlada del 2% mensual que mantiene el Banco Central (BCRA) sobre el tipo de cambio oficial, la reducción de la alícuota del impuesto PAIS a las importaciones en septiembre y la firmeza del Gobierno sobre el mantenimiento del superávit fiscal, los economistas esperan que en lo que resta del año sigan desacelerándose los precios y descartan una devaluación..